lunes, 20 de febrero de 2017

ARDIENDO EN LA NOCHE

Cómo saber si soy tu esclavo, cómo si es mío lo vivido. Cómo aprender de amargos tragos, cómo, si ya no es mío tu cariño. Cómo aprender de los errores, eludir a las serpientes que me aprietan la garganta, las razones y los topes que le encuentro yo a mi cama, por la noche. Cuando esté dormido espero que vengas a verme, apenas hablemos. Lluevan gotas de cariño mientras nuestros cuerpos se destrocen, y si eso, susurremos. Que me digas con tus gestos -no puedo seguir así-, pero dentro de ese sueño me despierte la codicia y me haga ver que no deliro, vida misma. Entonces me pellizcan la soledad y las ganas de ser salvaje, y me llevan a este mundo donde sé que no te tengo. Donde sé que sólo espero. Donde soy mero escribano rellenando hojas de un cuento. No quiero el protagonista, no quiero sufrir más, quiero ser el escritor para engañar con falsos textos. Que se piensen los demás que no quiero seguir sufriendo, pero cuando me revelo quemo al fuego, estoy ardiendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

PERDERME

Me perdí, me perdí, me perdí. Me perdí por las noches buscándome en los bares. Y sufrí y reí y sufrí... por haberte dado tanto y ahora no ...